Tras la cremación de un ser querido, a veces surge la necesidad de abrir la urna de cenizas. Esto puede deberse a distintos motivos: satisfacer el deseo del fallecido de esparcir sus cenizas en un lugar con valor simbólico, trasladarlas a otra urna más adecuada o repartirlas entre varios familiares.
Sea cual sea la razón, lo cierto es que muchas personas se preguntan cómo abrir una urna de cenizas de forma correcta, sin dañar el recipiente ni poner en riesgo el contenido. Es una duda muy frecuente porque no todas las urnas se abren de la misma manera, ya que tienen diferentes tipos de cierres, y forzar una tapa sin conocer el sistema puede provocar un derrame accidental o deteriorar la urna.
En este artículo encontrarás una guía paso a paso que explica los tipos de cierre, cómo abrir la urna de forma segura y qué precauciones debes tener en cuenta.
Tipos de cierre de las urnas de cenizas
El tipo de cierre es el primer aspecto a considerar antes de intentar abrir una urna. Existen dos sistemas principales: las urnas con tapa de rosca y las urnas con tapa sellada.
Urnas con tapa de rosca
Las urnas con tapa de rosca son uno de los modelos más habituales. Funcionan de manera similar a un frasco: la tapa se enrosca sobre el cuerpo de la urna y se abre girándola en sentido contrario a las agujas del reloj.
Estas son las ventajas principales de las urnas de tapa de rosca:
- Son fáciles de abrir y cerrar.
- No requieren herramientas especiales.
- Ofrecen seguridad, pero a la vez permiten un acceso sencillo.
Este tipo de cierre es común en urnas metálicas o de madera. Resulta especialmente práctico cuando se prevé que las cenizas puedan ser manipuladas en más de una ocasión, como en el caso de traslados o divisiones entre familiares.
Urnas con tapa sellada
En otros casos, la urna puede venir sellada con adhesivo o silicona. Esta técnica garantiza que la tapa no se abra por accidente y que el contenido quede completamente protegido.
Características de las urnas selladas:
- Son más seguras frente a derrames.
- Están pensadas para un uso más definitivo.
- Su apertura requiere tiempo y cuidado, ya que no basta con girar la tapa.
Este tipo de urna suele entregarse directamente por el crematorio, especialmente cuando la familia no ha solicitado manipular las cenizas de inmediato.
Pasos para abrir una urna de cenizas
Una vez identificado el sistema de cierre, ya se puede proceder con la apertura. Hacerlo con calma y en un entorno seguro es fundamental.
Identificar el tipo de urna
El primer paso es observar con detenimiento la urna. Pregúntate: ¿la tapa parece enroscada o pegada? ¿Se aprecia una junta de silicona? Si tienes dudas, lo ideal es consultar a la funeraria que entregó la urna, ya que podrán confirmar el tipo de cierre y saber este detalle evitará daños en la urna y accidentes durante la manipulación.
Girar la tapa si es una urna de rosca
En el caso de las urnas de rosca, basta con girar la tapa en sentido antihorario.
Si la tapa está muy ajustada o lleva tiempo cerrada, puede ser útil envolverla con un paño seco para mejorar el agarre y hacer un movimiento lento y constante sin aplicar una fuerza excesiva. Es recomendable realizar esta operación sobre una mesa cubierta con una toalla, de manera que cualquier partícula de ceniza quede contenida en caso de que se desprenda.
Unta un algodón con alcohol para debilitar el adhesivo si está sellada
En las urnas con tapa sellada, el procedimiento es distinto. La tapa suele estar fijada con un adhesivo fuerte, por lo que se recomienda usar alcohol para debilitar el adhesivo.
El proceso es sencillo:
- Empapa un algodón con alcohol.
- Pásalo suavemente por toda la unión entre la tapa y el cuerpo de la urna.
- Deja que actúe unos minutos para que el adhesivo se ablande.
- Repite el proceso si es necesario hasta que la tapa pueda retirarse con suavidad.
Este método es seguro y evita dañar la urna o poner en peligro el contenido. Nunca es recomendable hacer palanca con herramientas punzantes, ya que podrían romper la tapa o provocar un derrame inesperado.
Precauciones al abrir una urna de cenizas
Abrir una urna funeraria no es un gesto cualquiera: requiere respeto, cuidado y un entorno preparado para que todo salga bien.
Algunas recomendaciones importantes son:
- Usar guantes desechables para mayor higiene.
- Realizar la apertura en un espacio cerrado, sin corrientes de aire.
- Colocar una superficie blanda bajo la urna, como una toalla o mantel.
- No emplear herramientas agresivas como cuchillos o destornilladores.
- Si la urna es muy valiosa, está muy sellada o es de un material delicado, considerar pedir ayuda a un profesional funerario.
Muchas familias realizan este proceso como preparación para esparcir las cenizas de un ser querido en un lugar significativo, como el mar, la montaña o un jardín con valor emocional. En estos casos, planificar con calma y tomar medidas de seguridad ayuda a que el momento sea respetuoso y sin imprevistos.
Preguntas frecuentes sobre abrir urnas funerarias
¿Abrir la urna de cenizas afecta la conservación de las cenizas?
No. Las cenizas son restos inorgánicos que no se deterioran al contacto con el aire. Sin embargo, abrir la urna aumenta el riesgo de derrames accidentales. Por eso, si no se van a esparcir en ese momento, conviene volver a cerrarla correctamente o trasladarlas a otro recipiente seguro.
¿Se necesita autorización para abrir una urna de cenizas?
No. Una vez entregada, la urna pertenece a la familia y puede abrirse en un entorno privado sin necesidad de permisos. Lo único que puede requerir autorización es el esparcimiento de las cenizas en espacios públicos o naturales, como playas, montañas o ríos. En estos casos, es recomendable consultar la normativa local para asegurarse de que el acto se realice de manera legal y respetuosa.